El tamaño y la forma del pene pueden ser preocupaciones para algunas personas, y es importante abordar estos temas con información precisa y cuidado. Los extensores de pene o dispositivos de tracción peneana son herramientas que se utilizan en algunos casos específicos, como los que mencionaste, para ayudar en el alargamiento del pene o para tratar afecciones como la enfermedad de Peyronie. Estos dispositivos funcionan aplicando una tracción constante al pene con el objetivo de estimular el crecimiento celular y corregir deformidades en casos de Peyronie.
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Es importante destacar que el uso de extensores de pene debe realizarse bajo la supervisión de un profesional médico, ya que su uso inadecuado o excesivo puede causar lesiones o problemas de salud. Además, los resultados pueden variar de persona a persona, y no todos los hombres necesitan o desean aumentar el tamaño de su pene.
Es fundamental tener en cuenta que la autoestima y la confianza en uno mismo no deben depender del tamaño o la forma del pene. La comunicación abierta y la aceptación de la diversidad en las relaciones sexuales son aspectos cruciales para mantener una vida sexual saludable y satisfactoria. Si alguien tiene inseguridades relacionadas con su cuerpo, es aconsejable hablar con un profesional de la salud o un terapeuta sexual para abordar estas preocupaciones de manera adecuada y constructiva.
El tamaño del pene: ¿qué es normal y qué no?
Es común sentir preocupación acerca del tamaño de tu pene y si es considerado normal o no, especialmente en el contexto de satisfacer a tu pareja en las relaciones sexuales. Sin embargo, la mayoría de los hombres que creen tener un pene demasiado pequeño en realidad poseen penes de tamaño promedio.
De manera similar, muchos hombres tienen una percepción exagerada de lo que se considera un tamaño “normal” para el pene.
Es importante destacar que la longitud de un pene en estado flácido no suele predecir de manera consistente su longitud durante una erección. Si tu pene mide alrededor de 5 pulgadas (unos 13 cm) o más cuando está erecto, se encuentra en el rango típico en términos de tamaño.
Se considera que un pene es pequeño si mide menos de 3 pulgadas (unos 7,5 centímetros) cuando está erecto. Esta condición se denomina micropene.
Productos para el agrandamiento del pene: ¿Mitos o realidades?
Es común encontrar una amplia promoción de métodos para agrandar el pene, pero es esencial tener en cuenta que la mayoría de estos enfoques carecen de respaldo científico y pueden incluso provocar daños permanentes. Aquí te presentamos algunos de los productos y técnicas más publicitados en este ámbito:
- Píldulas y lociones: Estos productos suelen contener vitaminas, minerales, hierbas medicinales o hormonas que, según los fabricantes, promueven el agrandamiento del pene. Sin embargo, no existe evidencia científica que respalde la eficacia de ninguno de estos productos, y algunos de ellos pueden ser perjudiciales.
- Bomba peniana: Las bombas penianas a veces se utilizan para tratar la disfunción eréctil al dirigir sangre hacia el pene, lo que provoca una temporaria sensación de mayor tamaño. El uso excesivo o prolongado de estas bombas puede dañar el tejido elástico del pene y resultar en erecciones menos firmes.
- Ejercicios (jelqing): Estos ejercicios implican un movimiento manual que lleva sangre desde la base hacia la cabeza del pene. Aunque esta técnica puede parecer más segura que otras, no se ha demostrado científicamente su eficacia y puede causar cicatrices, molestias y deformidades.
- Estiramientos: Los estiramientos implican el uso de dispositivos extensores en el pene, también conocidos como dispositivos de tracción peniana. Estos dispositivos aplican una fuerza suave al pene. Algunos estudios pequeños han informado incrementos en la longitud de alrededor de media pulgada a casi 2 pulgadas (1 a 3 centímetros aproximadamente) con su uso. Sin embargo, esta actividad puede resultar incómoda y requiere un uso prolongado de 4 a 6 horas al día durante muchos meses para obtener resultados. Se necesita más investigación para verificar la seguridad y eficacia de este enfoque.
En resumen, es esencial abordar con precaución cualquier método o producto destinado al agrandamiento del pene, ya que la mayoría carece de respaldo científico y puede conllevar riesgos para la salud. Si tienes preocupaciones sobre el tamaño de tu pene, es aconsejable hablar con un profesional de la salud antes de considerar cualquier intervención.
¿Cómo funciona un alargador de pene?
Los dispositivos de tracción peneana operan aplicando tensión axial al tejido, es decir, estiran el pene. Esto resulta en un aumento de la tensión mecánica en el tejido, que, al detectar esta tensión adicional, responde generando nuevas células para aliviarla y crecer.
Puede entenderse de manera sencilla como cuando alguien utiliza expansores en las orejas. Inicialmente, el expansor que cabe es pequeño, pero a medida que se tracciona el tejido, este se “estira”.
¿Cuánto puede aumentar el tamaño del pene un dispositivo de tracción peneana?
Siendo realistas, un extensor de pene puede aumentar la longitud en aproximadamente 2 centímetros, ni más ni menos. Sin embargo, es crucial ser constante y utilizarlo durante al menos 2 horas al día, preferiblemente más, todos los días, durante unas 14 semanas.
Este enfoque tiene respaldo en estudios que demuestran que el uso de un extensor puede contribuir al aumento de longitud. Desde una perspectiva médica, los extensores se aplican en dos situaciones: cuando un hombre desea incrementar el tamaño de su pene y cuando un hombre, generalmente después de una operación de cáncer de próstata, busca preservar su tamaño.
Existe una tercera situación en la que los extensores de pene pueden ser útiles, que involucra a hombres que han sido sometidos a una prótesis de pene que necesita retirarse debido a una infección. Del mismo modo que en el caso de los hombres con cáncer de próstata, el extensor de pene puede ayudar a prevenir la retracción del pene.
Tipos de extensores de pene:
Hay dos tipos principales de dispositivos de tracción peneana en función del mecanismo de fijación al pene. El primer tipo son los extensores de pene androgenitales/jesextender, que sujetan el glande mediante una banda plástica que lo “aprisiona”. El segundo tipo de extensor asegura el glande a través de una campana de succión que lo aspira y estira.
Extensor de pene y enfermedad de Peyronie:
La forma del pene también puede plantear preocupaciones, especialmente en casos de enfermedad de Peyronie, una afección inflamatoria que forma placas dolorosas en el pene, causando una deformación y curvatura. El uso de un extensor de pene junto con masajes ha demostrado mejoras significativas en pacientes con enfermedad de Peyronie, reduciendo la necesidad de tratamientos más agresivos.
¿Cómo se usa un extensor de pene?
Para tratar estas dos condiciones, se emplea un extensor de pene que aplica una fuerza de tracción. Este dispositivo se ancla en la base del pene y en el surco subcoronal, y unos brazos conectan ambos anclajes para proporcionar la tracción. Se recomienda utilizar el dispositivo durante un promedio de 5-6 horas al día para obtener resultados notables.
Precio de un extensor de pene:
Los precios varían entre 150 y 500 euros. Hay extensores estadounidenses que son costosos y se utilizan en situaciones particulares, y su calidad y efectividad están respaldadas. Sin embargo, para la mayoría de hombres que buscan aumentar el tamaño del pene o tratar la enfermedad de Peyronie, se aconseja utilizar un extensor con un buen servicio de atención al cliente, ya que su uso puede ser complicado en ocasiones. Es importante evitar extensores excesivamente baratos, ya que la calidad puede ser deficiente y carecerán de servicio postventa.
En resumen, los extensores de pene ofrecen una alternativa efectiva para aumentar el tamaño del pene o tratar la enfermedad de Peyronie, con resultados notables de alrededor de 1 a 2 centímetros de aumento después de un uso constante durante 14 semanas. En comparación con la cirugía, los extensores son considerados una opción más segura y efectiva.
